LA TRINI, MUJER TRANSEXUAL, CLARA Y DIVERTIDA

 

14 de Mayo de 2021


ENTREVISTA A LA TRINI,
mujer transexual, clara y divertida

Trini y yo nos conocimos en un debate en Comentarios de Instagram sobre si las mujeres trans debían competir en las olimpiadas en la categoría de mujer. Las dos coincidiamos en que si.


Trini, 47 años, nacida en 1974, hija de una madre soltera muy empoderada, me cuenta cómo descubrió ella que era una mujer transexual. Le propuse una entrevista con el fin de conocer su historia y saber cómo puedo contribuir a que los niños trans lo tengan más fácil. Mi inquietud empezó cuando mi hijo mostró signos de molestia cuando lo confundieron con una niña por tener el pelo en melenita. Entonces, reflexioné sobre si yo tenía que contestar por él o no, para aclarar su sexo, y decidí que fuera él quien contestara si quería. Y eso me llevó a pensar en ¿por qué alguien le tiene que aclarar el sexo* o su identidad de género* a otra persona sólo porque su imagen le resulte ambigua?


*sexo: se refiere al sexo biológico. Si tiene pene, chico; si tiene vulva, chica.

*identidad de género: se refiere a cómo se siente la persona: si se siente niño o niña. En 2021 se habla de la identidad “no binario” para referirse a personas que no se identifican ni como hombre ni como mujer, sino como persona.


Trini, clara y directa, me aconseja y además me cuenta su historia:


TRINI: - Quítale hierro al asunto. Los hombres y mujeres son iguales, no hay nada de malo que le confundan con una chica. Y si hay un tono hostil, entonces confrontarlo, y ser seca y directa: - “Lleva el pelo como le da la gana. Estamos en el 2021 cada uno va como quiere”. De todas formas ahora no es como antes. Hoy en día hay mucha más información y los padres defienden a muerte a sus hijos trans. Antes no se hablaba de sexualidad y ahora tenemos a chicos de 20 años que se han educado en la sexualidad con el porno.


B: - Según tengo entendido con tres años ya pueden tener una identidad de género, y sentirse niño o niña.


TRINI: - Bueno ahora hay mucha más información. En mi época (los 70) no habían niños trans ni de tres, ni de siete, ni de ocho años. Ahora si, y sus padres defienden sus derechos.

Yo no sabía a los ocho años que era una niña. A mi me tenían por maricón, por mi amaneramiento y mi pluma. Los niños decían “ostia puta” y yo decía “oh dios mio”. (Se ríe). Yo desde 4º de EGB empecé con las peleas. Decidí que no iba a ser una víctima, y me defendía. En muchas ocasiones, hablar con educación no me ha servido de nada.


B: - ¿Y cómo te diste cuenta de que eras una mujer?


TRINI: - Ví la película “Vestida de azul” con mi madre. Esa peli me hizo ver que existía la posibilidad. Luego a los 12-13 años descubro que me gustan los hombres. Me meto en el ambiente gay, y descubro que yo no me identifico como hombre ni me gusta ese rollo.

Yo desde muy jóven ya salía. Entonces conozco a dos transformistas y me enseñan el ambiente trans, y empiezo a salir con ellas por las Ramblas. Habían unas cafeterías donde quedaban para hablar, luego se iban a la esteticien a depilarse. Era como un circuito.

A los 15 años una amiga y yo compramos en la farmacia una caja de hormonas. Entonces las podías comprar sin receta o las traían de Alemania. Ahora en la Seguridad Social hay un apartado que se llama Transit donde hay una doctora, una sexóloga y un trabajador social que te las recetan.

Mi amiga y yo nos chutamos las hormonas. Y al día siguiente, le enseño el culo a mi madre y le digo: “Mamá, soy una mujer y me estoy hormonando”.

El primer año, me hormono pero no me visto (de mujer) por la mañana. Me da miedo porque me perseguían. Me visto por la noche sólo. Hasta que un día, mi madre me compra mi primer conjunto, unas mayas y una camiseta ancha; y me dice “Si eres una mujer, tienes que ir vestida como una mujer”.

A los 16 años me voy de casa porque la relación con mi madre era mala. A mi me perseguían por la calle y me pegaban, y ella me echaba la culpa de eso y de que la gente le hablara mal de mí. Así que a los 16 años me emancipo y me meto en la prostitución. Ahí lo paso muy mal porque tengo compañeras hostiles. Era nueva, y como yo estaba buenorra había envidias. Venían a tocarme las tetas para ver si eran de verdad. Eso si, si venía un coche a decirnos algo, nos uníamos y le reventabamos el coche. En Madrid no era así, pero en Barcelona si, nos protegíamos.

A los 19 años ya no puedo más y me voy con una amiga que tenía una entrevista de trabajo en Zaragoza para un puesto de gogo, y yo que no tenía entrevista ni nada, me voy con ella a ver si me cogen a mi también.

Conozco un chico y estoy dos años en pareja, en normalidad. Luego vuelvo a la prostitución. Luego conozco a un chico y estoy diecisiete años casada con un jugador de waterpolo. Y luego, vuelvo otra vez a la prostitución.

Ojo, la prostitución puede ser lo que tu quieras. No la quiero estigmatizar. Puedes llevarlo de forma profesional, desde casa, sin estar en la calle. No la voy a criticar yo, que me ha dado de comer, y gracias a ella he vivido una vida que no me tocaba vivir, por la familia en la que nací. Yo he viajado a Japón, a muchos sitios… La frase que dicen “rechazadas socialmente, aceptadas sexualmente” es una verdad como un templo.

Yo estaba trabajando y cuando dije que me estaba hormonando, me despidieron. Fue un palo muy grande.

Ir por la calle y notar cómo te señalan y cómo se ríen...Y justo esos hombres que te señalan, luego son los que van a buscarte para follarte.

Desde 4º de EGB yo ya empecé con las peleas. En muchas ocasiones hablar con educación no me ha servido de nada. Me parece muy importante confrontarlos, no ser víctima.

Hace un año en el gimnasio había un hombre que no paraba de mirarme y reirse con el compañero. Cuando estaba solo yo le miraba, y sólo miraba para abajo. Normalmente están unos días con risitas y luego se les pasa. Pero éste, durante dos meses estuvo con risitas.

Entonces, se lo comenté al dueño del Gym y cuando lo tenía a dos metros de él, le dije “éste es”. Y él me dijo “¿qué quieres que haga?”. “Nada, a ver que pasa…” le dije.

Y entonces seguía, y yo un día hice como la policia en las manifestaciones, que provocan el estallido para controlar el estallido. Empecé a grabarlo con el móvil y me iba acercando. Hasta que se puso como un energúmeno y vino hacia mí. Y le dije: “estoy haciendo lo que has hecho tú durante dos meses”. Y entonces se excusaba en que no, que era broma, que él no había dicho nada… Toda esta gente es una cobarde. Los hombres no actúan igual cuando están sólos que cuando están en grupo. Se lo dije: “Eres un cobarde”.

Yo, después de estas discusiones, yo llego a casa y lloro, me da ansiedad. Así que procuro no estigmatizar, no hay motivos.

Hoy en día sigo teniendo miedo cuando voy por la calle, pienso: se van a dar cuenta…


Lo que me ha ayudado en esta vida es el HUMOR. Puedo estar en el hospital con el cuello roto y echarme a reir.


La última vez que me pasó fue en una oficina de piezas de coche de mi calle. Cada vez que pasaba oía como se reían en grupito. Entré y la líe. Y encima él era maricón y le dije:

¡Que tú eres maricón! ¡Que los que nos quieren quemar a ti y a mí son los mismos! Que nos van a quemar a los dos, la única diferencia que hay aquí es que a mí se me van a querer follar y luego me quemarán, y a ti te quemarán directamente.”

También me pasó en Mercadona, se lo dije a la encargada y como la chica era gordita, había pasado por algo parecido y me entendió.


B: - Realmente es todo lo diferente, lo confuso, lo que se sale de los cánones establecidos...gordos, trans, feos…


TRINI: - Todo lo que se sale del Standard. Aquí han hecho un apartheid con los gitanos, y con los trans también. El mundo de la noche y el artisteo es quienes empezaron a abrirnos las puertas para trabajar.


B: - Bueno, para terminar la entrevista. Una serie…


TRINI: - “Pose”, “Transparent” y “La veneno”. “Pose” refleja más mi vida. “Transparent” trata de un hombre mayor que descubre que se siente mujer y se lo dice a su mujer y esta lo acepta y sigue con él. Él se siente mujer pero sigue enamorado de su mujer, es una mujer lesbiana.


BB: - Una película:


TRINI: - “Vestida de azul”, la historia de cuatro transexuales.


BB: - Un libro:


TRINI: - Un clásico, mis libros favoritos: “El guardián entre el centeno” y “El principito”


BB: - Una canción:


TRINI: - Malú, “como una flor”. O “mujer contra mujer” de Mecano, creo que nos representa a todas.


BB: - Un referente


TRINI: - Mi madre. No supo ser mi madre. Es una mujer con poca cultura que ha tenido una vida difícil. Un día tuvimos una conversación gorda, le dije todo lo que había hecho. Se puso a llorar. Me pidió perdón y la perdoné. Empezamos de cero a conocernos. Ahora es una mujer de 77 años que aún mantiene la ilusión por comprarse un vestido nuevo, que es capaz de sentarse en un banco y ponerse a hablar con unas chicas de 16 años.


BB: - Muchas gracias Trini, más allá de la entrevista, me has enriquecido personalmente.


TRINI: - Gracias a ti también, me gusta saber que hay madres como tú que se preocupan de cómo educar a sus hijos. La educación es el único camino posible, en el amor y la tolerancia.

 


 

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